BIBLIA NUEVO TESTAMENTO 292
En el camino a mediodía, oh rey, vi que desde el cielo una luz, más resplandeciente que el sol, alumbró alrededor de
mí y de los que viajaban conmigo. 14 Habiendo caído todos nosotros a tierra, oí
una voz que me decía en lengua hebrea: “Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?
¡Dura cosa te es dar coces contra el aguijón!”
CORAN-Dr.JUAN VERNET 292
83) Y TE PREGUNTARÁN acerca del Bicorne. Di: “Os relataré algo por lo que debiera ser
recordado.”81(84) Le dimos, ciertamente, una buena posición en la tierra, y le dotamos [del conocimiento]
del medio correcto para conseguir cualquier cosa82 [que se propusiera]; (85) y él eligió el medio
correcto [en todo lo que hizo].83.Siguió su camino hasta que llego al ocaso del sol y encontró que este se ponía detrás de una fuente termal y en las inmediaciones encontró a una gente [entregada
a toda clase de maldad].
Dijimos: “¡Oh Bicorne! ¡Puedes castigarles o bien tratarles benignamente!”86
(87) El [les] dijo: “A quien obre injustamente [con los demás87] le castigaremos; y luego será
devuelto a su Sustentador, y Él le infligirá un castigo inefable.88 (88) Pero quien crea y haga
buenas obras, tendrá como recompensa el supremo bien [de la Otra Vida]; y [por nuestra parte,]
le ordenaremos [sólo] lo que es fácil de cumplir.”89
(89) Y de nuevo90 eligió el medio correcto [para lograr un fin justo].
90) [Y luego marchó hacia el este] hasta que llego donde nacía el sol,91 encontró
que ascendía sobre una gente a la que no habíamos dado protección contra él: (91) así [les
habíamos creado, y así los dejó él92] y ciertamente abarcábamos con Nuestro conocimiento
todo lo referente a él.93
(92) Y de nuevo eligió el medio correcto [para lograr un fin justo].
(93) [Y siguió su marcha] hasta que, cuando llegó [a un lugar] entre dos barreras montañosas,
94 encontró al pie de ellas a una gente que apenas entendía una palabra [de su idioma].
(94) Dijeron: “¡Oh Bicorne! En verdad, Gog y Magog95 están corrompiendo esta tierra.
¿Podemos, pues, pagarte un tributo a condición de que levantes una barrera entre ellos y
nosotros?”
(95) Respondió: “¡Aquello en lo que mi Sustentador me ha establecido es mejor [que lo que
vosotros me pudierais dar];96 así pues, ayudadme con vuestra fuerza [de trabajo, y] levantaré una
muralla entre vosotros y ellos! (96) ¡Traedme piezas de hierro!”
Luego, una vez que hubo [armado el hierro y] tapiado el espacio entre las dos laderas, dijo:
“¡[Encended un fuego y] aplicad vuestros fuelles!”97
Luego, cuando consiguió ponerlo [incandescente] como un fuego, [les] ordenó: “¡Traedme
bronce fundido para echarlo encima!”
(97) Y así [quedó erigida la muralla, y] sus enemigos98 no pudieron escalarla, ni tampoco perforarla.
(98) [El rey] dijo: “¡Esto es una misericordia de mi Sustentador! ¡Pero cuando se cumpla el
plazo fijado por mi Sustentador,99 Él la arrasará: y la promesa de mi Sustentador se cumple
siempre!”100
El Vellocino De Oro
Robert Graves 292
-Reina hermana, te doy las gracias por tus buenos deseos, y envidio de todo corazón tu vida feliz
junto al noble Alcinoo, felicidad que yo jamás podré esperar disfrutar. Pues, como ya sabes, las
sacerdotisas juradas de la diosa sufren la maldición de poseer la vista doble y la naturaleza doble: y
traman astuta y sangrientamente contra su propia inocencia, y en su angustia causan la destrucción
de aquellos que más las aman, y para alejar la soledad llenan su casa de embusteros, débiles y
rufianes.
Arete exclamó:
-¡Niña, no hables en ese tono tan terrible, aunque sólo lo hagas para evitar la envidia de algún dios o
de algún genio! La bondad se lee en tu rostro; no te puedo creer capaz de ningún acto malvado.
Espero que tengas muchos hijos, cuatro o cinco por lo menos; los niños, con sus encantos, ejercen
un efecto calmante sobre las mujeres dotadas de una inteligencia superior, como parece ser tu caso.
Medea respondió:
-Excelente Arete, no me atrevo a esperar tal felicidad, aunque según creo, soy una mujer tan
honrada como tú. La terrible Madre me acosa, se ha adueñado de mi alma y me ha convertido en el
vehículo de su implacable furia; hasta que haya terminado conmigo soy tan peligrosa para la ciudad
en que pueda hallarme como lo es una antorcha de pino encendida en un campo de cebada a punto
para la siega. Por lo tanto, reina hermana, si la bondad de tu corazón te lleva a salvarme ahora, será
una prueba, no sólo de tu virtud, sino de sabiduría; pero, por favor, no intentes persuadirme de que
me quede contigo ni un día más de lo necesario.
Miguel de Cervantes
DON QUIJOTE DE LA MANCHA 292
Amaneció más tarde, a mi parecer, de lo que quisiéramos; acabamos
de subir toda la montaña por ver si desde allí algún poblado se descubría,
o algunas cabañas de pastores, pero aunque más tendimos la vista, ni
poblado, ni persona, ni senda, ni camino descubrimos. Con todo esto determinamos
de entrarnos la tierra adentro, pues no podría ser menos sino que presto
descubriésemos quien nos diese noticia della; pero lo que a mí más me fatigaba
era el ver ir a pie a Zoraida por aquellas asperezas, que, puesto que alguna
vez la puse sobre mis hombros, más le cansaba a ella mi cansancio que la
reposaba su reposo, y así, nunca más quiso que yo aquel trabajo tomase; y con
mucha paciencia y muestras de alegría, llevándola yo siempre de la mano, poco
menos de un cuarto de legua debíamos de haber andado, cuando llegó a nuestros
oídos el son de una pequeña esquila, señal clara que por allí cerca había
ganado, y, mirando todos con atención si alguno se parecía, vimos al pie de un
alcornoque un pastor mozo, que con grande reposo y descuido estaba labrando
un palo con un cuchillo; dimos voces, y él, alzando la cabeza, se puso ligeramente
en pie, y a lo que después supimos, los primeros que a la vista se le
ofrecieron fueron el renegado y Zoraida, y, como él los vio en hábito de moros,
pensó que todos los de la Berbería estaban sobre él, y, metiéndose con estraña
ligereza por el bosque adelante, comenzó a dar los mayores gritos del
mundo, diciendo: «¡Moros, moros hay en la tierra; moros, moros, arma,
arma!» Con estas voces quedamos todos confusos, y no sabíamos qué hacernos,
pero considerando que las voces del pastor habían de alborotar la tierra,
y que la caballería de la costa había de venir luego a ver lo que era, acordamos
que el renegado se desnudase las ropas de turco y se vistiese un gilecuelco o
casaca de cautivo que uno de nosotros le dio luego, aunque se quedó en camisa;
y así, encomendándonos a Dios
Roberto Bolaño
2666 292
Te voy a explicar
cuál es la tercera pata de la mesa humana. Yo te lo voy a explicar.
Y luego déjame en paz. La vida es demanda y oferta, u
oferta y demanda, todo se limita a eso, pero así no se puede vivir.
Es necesaria una tercera pata para que la mesa no se desplome
en los basurales de la historia, que a su vez se está desplomando
permanentemente en los basurales del vacío. Así que
toma nota. Ésta es la ecuación: oferta + demanda + magia. ¿Y
qué es magia? Magia es épica y también es sexo y bruma dionisiaca
y juego. Y después Yeltsin se sentaba en el cráter o la letrina
y le mostraba a Amalfitano los dedos que le faltaban y hablaba
de su infancia y de los Urales y de Siberia y de un tigre
blanco que erraba por los infinitos espacios nevados. Y luego
sacaba una petaca de vodka del bolsillo del traje y decía:
–Creo que es hora de tomar una copita.
Y, después de beber y tras mirar al pobre profesor chileno
con una mirada maliciosa de cazador, retomaba, con más ímpetu
si cabe, su canto. Y después desaparecía tragado por el cráter
veteado de rojo o por la letrina veteada de rojo y Amalfitano
se quedaba solo y no se atrevía a mirar por el agujero, por
lo que no le quedaba más remedio que despertar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario