miércoles, diciembre 04, 2013

LUZ.

 

 

         

 

Buda contaba setenta y nueve años.Una tarde de otoño se había sentado de tal manera que el sol le daba en la espalda.Un momento ideal para que el fiel Ananda le diese el habitual masaje en los hombros y en los brazos.Comenzó a realizarlo con el animo de siempre,hasta que se detuvo sorprendido-Me esta sucediendo algo bastante extraño,oh señor.Me parece que la piel del Perfecto ha perdido la claridad y el resplandor de los últimos tiempos.Todos sus miembros parecen algo flácidos y ajados.Lo que antes era vivo,ahora se muestra casi mortecino.¿Como a cambiado tanto el sublime asceta?Buda lo miró con una sonrisa,sin sentirse ofendido porque las palabras que acababa de escuchar estaban cargadas de una gran ingenuidad.En efecto Ananda,en mi todo se ha modificado.Nunca olvides que la muerte nos esta aguardando desde el mismo instante en que venimos al mundo,el hecho de nacer nos convierte en reos de muerte.Lo que importa,es sentirse conforme con lo que se ha dejado atrás.

                                                    

Sueño de madre

Según la leyenda, la concepción de Buda fue milagrosa. Su madre, la reina Maya, soñó que era llevada a una meseta, bajo un árbol, y que un bodhisattva en forma de elefante real inmaculadamente blanco daba tres vueltas a su alrededor antes de penetrarla por su costado derecho

El escarabajo joya emite una luz que es invisible al ojo humano, pero no lo es para otros de la misma especie. Los científicos no saben exactamente qué es esa luz, pero se cree que ayuda a los animales a comunicarse.

El sermón del fuego

Algunos meses después de su iluminación, cuando vivía en Gaya, Buda pronunció el famoso sermón del fuego: «Todo arde. ¿Y qué es el todo que arde?Los fenómenos anticipados por el pensamiento arden de carencia, ira y engaño. Viendo la causa, y detestando el sufrimiento, el discípulo noble queda en calma

El oído está ardiendo, los sonidos están ardiendo, la conciencia auditiva está ardiendo y la sensación auditiva está ardiendo. También está ardiendo toda sensación placentera o dolorosa, o ni dolorosa ni placentera que surja por motivo de la impresión auditiva. ¿Ardiendo con qué? Ardiendo con el fuego de la pasión, ardiendo con el fuego del odio, ardiendo con el fuego de la ignorancia. Yo digo que está ardiendo con el nacimiento, la vejez y la muerte; con el pesar, la lamentación, el dolor, la aflicción y la desesperación.

http://vipassana-bhavana.blogspot.com.es/2011/06/el-sermon-del-fuego-o-sutta.html

                                                                       

     

                          2013-12-02 17.37.00

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