JUAN MARSÉ
CALIGRAFÍA DE LOS SUEÑOS 560 págs 560*2=1120-1004=116
EL GRAN PIANISTA DE NUEVE DEDOS. Podría ser un buen reclamo,
por qué no. ¿Quién sabe lo que te reserva el dedo
del destino, incluso cuando este dedo ha sido
arrojado al limbo de los pianistas nonatos? Pasan
algunos hombres frente al letrero, van o vienen de
sus casas a otros bares y tabernas con aire
decidido o desganado, algunos caminan arrimados
a los muros y uno de ellos se detiene de pronto con
la cabeza gacha y los ojos mirando el suelo, como
si de pronto se abriera un abismo bajo sus pies. En
la misma calle y un poco más arriba, en medio de la
pequeña isla de adoquines melancólicos y
verdosos, perviven las vías truncas que vienen del
ayer abolido y van a ninguna parte. Con un repentino
y punzante dolor en la uña que ya no está en su
dedo, ni el dedo en su mano, Ringo cierra el
cuaderno de solfeo y abre nuevamente el libro de
relatos
GAO XINGJIAN
LA MONTAÑA DEL ALMA
Traducción de Liao Yanping y José Ramón Monreal págs 307*4=1228-1004=224
PREMIO NOBEL 2000
¡Se habló de ello por todas partes! En Guangxi se capturó
realmente un pequeño hombre salvaje —allí se les denomina los diablos de las montañas—, pero
los campesinos creen que traen mala suerte y lo soltaron. (¡Qué lastima!) Luego están también
aquellos que han comido carne de hombre salvaje. Di lo que tú quieras, no importa, bueno, por otra
parte, el equipo de investigación ha llevado a cabo ya algunas comprobaciones, y obran en su poder
unos documentos escritos. ¡Afirman que en 1971, una veintena de personas, entre ellas Zhang
Renguan y Wang Liangcan, casi todos ellos trabajadores de nuestra reserva, se comieron en la
cantina de la granja de Yangriwan la pantorrilla y el pie de un hombre salvaje! La planta del pie
medía en torno a cuarenta centímetros de largo, el dedo gordo era de un grosor de cinco centímetros
y tenía diez de largo, el propio pie medía veinte centímetros de grueso y pesaba quince kilos; todos
estos documentos están debidamente atestiguados. Cada uno de ellos se comió de él un cuenco lleno
hasta arriba. Fue un campesino de Banshui el que lo mató con su fusil y luego vendió una pierna a
la cantina de Yangriwan
CORAN- pág 1004
SURA 111
Al-Masad (Las Fibras Retorcidas)
Período de Mecca
ESTE SURA muy temprano –el quinto en el orden de revelación—toma su nombre de su última
palabra. Se refiere a la enconada enemistad que mostró siempre hacia el mensaje del Profeta
su tío Abu Lahab: una enemistad arraigada en su arrogancia innata, en el orgullo por su gran riqueza,
y en su antipatía por la idea, propugnada por Muhámmad, de que todos los seres humanos
son iguales ante Dios y que serán juzgados por Él sólo conforme a sus méritos (Ibn Seid, citado
por Tabari en su comentario al primer versículo de este sura).
Según ha sido transmitido por varias autoridades fidedignas –Bujari y Muslim entre
ellas—el Profeta se subió al altozano de As-Safa, en Mecca, y llamó a todos los que podían oirle
de su tribu, los Quraish. Cuando se hubieron reunido, les preguntó: “¡Oh hijos de Abd al-
Muttalib! ¡Oh hijos de Fihr! ¿Si os informara de que un enemigo está a punto de atacaros desde
detrás de esa colina, me creeríais?” Respondieron: “Si, te creeríamos.” Entonces dijo: “¡Pues, he
aquí, que os advierto de la llegada de la Última Hora!” Al oír esto, Abu Lahab exclamó: “¿Para
esto nos has hecho venir? ¡Muérete!” Y poco después fue revelado este sura.
JAMES JOYCE-ULISES 569 1004-659=345
Leamos los astros. Autontimerumenos
Bous Stephanoumenos. ¿Dónde está su
constelación? Esteban, Esteban, corta parejo el
pan E. D.: sua donna. Già: di lui. Gelindo
risolve, di non amar. E. D.
—¿Qué es eso, señor Dedalus? —preguntó
el bibliotecario cuáquero—. ¿Era un fenómeno
celeste?
—Una estrella de noche —dijo Esteban—
y de día una colmena de nube.
—¿De qué más hablar?
Esteban miró su sombrero, su bastón, sus
zapatos. Stephanos, mi corona. Mi espada. Sus
zapatos están echando a perder la forma de mis
pies. Compra un par. Agujeros en mis
calcetines. Pañuelo también
Pero simula. Simula charlar. Se burlan para
probarte. Simula. Sé simulado.
Avefría.
Estoy cansado de mi voz, la voz de Esaú.
Mi reino por un trago.
Sigue.
—Ustedes dirán que esos nombres
estaban ya en las crónicas de dónde él tomó la
materia prima de sus dramas. ¿Por qué tomó
ésos con preferencia a otros? Ricardo, un ruin
bastardo jorobado, hace el amor a una Ana en
estado de viudez (¿qué significa un nombre?),
ROBERT GRAVES-LA DIOSA BLANCA 208pags 208-5=1040-1004=36
Perro, Corzo Y Ave Fría
El relato más completo de la Batalla de los Arboles original, aunque en él no se
menciona al avefría, está publicado en la Myvyrian Archaiology. Es éste un ejemplo
perfecto de taquigrafía mitográfica y registra lo que parece haber sido el acontecimiento
religioso más importante en la Britania precristiana.
«Estos son los englyns [estrofas epigramáticas] que se cantaban en la
Cad Goddeu, o, como la llaman otros, la Batalla de Achren, que se libró a causa
de un corzo blanco y un cachorro; y provenían de Annwn (el infierno), y
Amathaon ap Don los trajo. Y por consiguiente Amathaon ap Don y Arawn, Rey
de Annwm, combatieron. Y en esa batalla había un hombre que a menos que se
conociera su nombre no podía ser vencido y había en el otro lado una mujer
llamada Achren ('Arboles') y a menos que su nombre fuese conocido su bando
no podía ser vencido. Y Gwydion ap Don adivinó el nombre del hombre, y cantó
las dos englyns siguientes:
Cascos seguros tiene mi corcel espoleado;
las altas ramas del aliso están en tu escudo;
te llamas Bran, el de las ramas relucientes.
Cascos seguros tiene mi corcel en la batalla;
las altas ramas del aliso están en tu mano;
eres Bran, por la rama que llevas
Amathaon el Bueno ha vencido.»
antropólogos. En la Antigüedad, una vez que se descubría el nombre secreto de un dios,
los enemigos de sus seguidores podían utilizarlo para perjudicarlos con su magia. Era
una práctica corriente de los romanos el descubrimiento de los nombres secretos de los
dioses enemigos para llamarlos a Roma con promesas seductoras, procedimiento al que
se denominaba técnicamente elicio
ROBERTO BOLAÑO-2666 pág 1004
Durante todo aquel día estuvo pensando en por qué se había
cambiado el nombre. En el bar todos sabían que se llamaba
Hans Reiter. La gente que conocía en Colonia sabía que se llamaba
Hans Reiter. Si la policía finalmente decidía perseguirlo
por el asesinato de Sammer, pistas a nombre de Reiter no le
iban a faltar. ¿Por qué entonces adoptar un nom de plume? Tal
vez Ingeborg tiene razón, pensó Archimboldi, tal vez en el fon-
do estoy seguro de que me voy a hacer famoso y con el cambio
de nombre tomo las primeras disposiciones de cara a mi seguridad
futura. Pero tal vez todo esto significa otra cosa. Tal vez, tal
vez, tal vez...
BORGES-OBRAS COMPLETAS pág 1004
EL GUARDIAN DE LOS LIBROS
Ahí están los jardines, los templos y la justificación de los templos,
La recta música y las rectas palabras,
Los sesenta y cuatro hexagramas,
Los ritos que son la única sabiduría
Que otorga el Firmamento a los hombres,
El decoro de aquel emperador
Cuya serenidad fue reflejada por el mundo, su espejo,
De suerte que los campos daban sus frutos
Y los torrentes respetaban sus márgenes,
El unicornio herido que regresa para marcar el fin,
Las secretas leyes eternas,
El concierto del orbe;
Esas cosas o su memoria están en los libros
Que custodio en la torre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario